EAPN España y EAPN Madrid abren un diálogo para plantear propuestas sobre la aplicación del IMV y su encaje en la CCAA
 
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lunes, 14 de diciembre de 2020 - EAPN España y EAPN Madrid abren un diálogo para plantear propuestas sobre la aplicación del IMV y su encaje en la CCAA

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EAPN España y EAPN Madrid han celebrado el 11 de diciembre el webinar: Rentas mínimas adecuadas y accesibles para familias vulnerables: El desarrollo de la aplicación del IMV y su encaje en las comunidades autónomas. Un espacio de diálogo y reflexión con representantes de gobierno central y autonómico para avanzar en el análisis de las principales fortalezas y debilidades de la implementación de esta prestación no contributiva.
Antonio Llorente Simón, vicepresidente primero de EAPN Madrid, resaltó durante la inauguración "el papel de las entidades del tercer sector para acompañar a las personas en situación de exclusión social". Por su parte, Carlos Susías, presidente de EAPN España señaló que a pesar de la importancia del ingreso mínimo vital (IMV) existen escenarios que deben mejorar: “sigue habiendo problemas para que la prestación llegue a todas las personas a las que debe llegar y es necesario que la ley se adecúe y sea flexible para llegar al mayor número de personas. No se trata de una medalla. Es un instrumento útil que incide en la vida de las personas más vulnerables”.

Las políticas de desarrollo social son competencias de las Comunidades Autónomas (CCAA), recordó Sucías, por lo que las administraciones “deben regular los instrumentos de complementariedad del IMV para que lleguen a la población. No se pueden retirar los apoyos de las CCAA antes de que funcione de forma efectiva el IMV. Han de mantenerse e incluso incrementarse”, sentenció.

Por su parte, Graciela Malgesini, responsable de asuntos europeos e incidencia política de EAPN España, explicó que el Ejecutivo "pretende reducir alrededor de un 80% la pobreza severa, utilizando como indicador un umbral de ingresos inferiores al 30% de la mediana de la renta". Desde esta mirada, Malgesini señaló que “el ingreso mínimo vital no resolverá por sí solo la magnitud de la pobreza en España, ya que se dirige a los hogares en situación más vulnerable, en situación de pobreza muy severa. Las organizaciones sociales recuerdan además que la pandemia no es un momento para reducir la inversión en protección social, ya que la pobreza aumentará debido a la crisis asociada al COVID-19”.

Los problemas prácticos que se están encontrando las entidades con respecto al acceso y cobertura del IMV son de accesibilidad: brecha digital o falta de transparencia respecto a las causas de denegación, comprensión de los montos recibidos, explicación de los procesos en un lenguaje sencillo o la posibilidad de presentación de reclamaciones, entre otros. También existen problemas de adecuación a las necesidades de la población como, por ejemplo, la falta de criterios y recursos comunes para garantizar la igualdad de condiciones o los problemas asociados a la tramitación como la necesidad de simplificar y desburocratizar los procesos en el ámbito estatal y autonómico.

Por su parte, Esther Pérez Quintana, subdirectora general de Políticas de Inclusión del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones afirmó que, "desde su creación, el IMV está siendo evaluado de forma permanente, vigilando su funcionamiento y comprobando si está llegando. Se han realizado evaluaciones para tratar de eliminar las barreras que hacen que la prestación no llegue a un sector de la población. Esta norma está en trámite parlamentario·, recordó Pérez, quien señaló que las barreras identificadas van a ser tenidas en cuentas para que sean modificadas en el proceso.

Hay una serie de desarrollos que se están analizando, destacó Pérez, como los gastos del alquiler, la incentivación al empleo y la necesidad de involucrar en el tercer sector en el recién creado Consejo Consultivo del IMV.

Durante su presentación, Graciela Malgesini presentó una serie de propuestas y recomendaciones*  elaboradas por EAPN España orientadas a cooperar entre los diversos actores para facilitar una gestión que sea realmente inclusiva. 

* Páginas de las 27 a la 31.